La descarbonización es el proceso de reducción de las emisiones de carbono (principalmente de CO2) a la atmósfera. Su objetivo es lograr una economía global con bajas emisiones que consiga la neutralidad a través de la transición energética.
DESCARBONIZACIÓN DE BARRIOS
Alcanzar la neutralidad de carbono se ha convertido en un objetivo para muchas ciudades. Con este fin, numerosas iniciativas se han propuesto desde hace décadas para establecer un plan que permita alcanzar este ambicioso objetivo.
Este proyecto ha desarrollado una metodología para evaluar acciones específicas que contribuyan a crear una ciudad climáticamente neutra. En primer lugar, se obtuvo el inventario de la huella de carbono de los distritos/barrios de Valencia. Gracias a ello, se ha podido realizar un análisis diagnóstico de la huella de carbono a nivel de ciudad, distrito e incluso barrio. Esto nos ha permitido analizar las causas de estas emisiones y evaluar el impacto de las diferentes acciones para reducirlas.
En el caso concreto de Valencia, el autoconsumo fotovoltaico presenta los mejores beneficios para reducir las emisiones directas en la ciudad. Entre las posibles implicaciones de esta medida, sería necesario generar un mayor conocimiento de los sistemas fotovoltaicos comunitarios en las ciudades y agilizar los procedimientos de comprensión y regulación para alcanzar el potencial de la ciudad lo antes posible.
Al añadir las emisiones indirectas producidas debido al alcance 3, las reducciones disminuyen hasta el 10%. Aunque ninguna de las medidas por sí sola ha mostrado reducciones superiores al 5%, la implantación de un
distrito de 15 minutos será la medida más beneficiosa si el objetivo es reducir las emisiones indirectas y directas.
Otras necesidades serían un estudio más detallado de la movilidad de la zona, con un mejor conocimiento de las dinámicas sociales y económicas establecidas. Además, con estos resultados, es posible concluir que las iniciativas europeas están dejando fuera muchas emisiones que deberían considerarse en relación con las ciudades climáticamente neutras.
Por otro, puede combinarse con un futuro sistema de seguimiento de las actividades en la ciudad para obtener emisiones de GEI casi en tiempo real a escala de barrio y averiguar sus causas. Asimismo, la gran necesidad de datos fiables a escala local y la falta de disponibilidad de los mismos han obligado a recurrir a otros estudios. Esto ha sido ligeramente desfavorable para una metodología totalmente ascendente.